Cuando siento que pierdo el rumbo
y no sé hacia dónde avanzar
algo se nubla en mi mundo
el paisaje se vuelve otoñal,
entre amarillezco y rojizo
yo tomo su mano sin miedo
y me preparo para volar
Llena mi camino de hojas
para que vaya despacio,
oyendo cada sonido,
mirando cada color.
disfrutando el recorrido
Me abraza con su calor,
otras veces me susurra,
me calma, me acelera
me bendice con su manto
de rabia, de alegría o de dolor
Entonces me pierdo segura
en esta incertidumbre ancestral,
disfrutando del paisaje,
de su mano por la vida,
sabiendo que formo parte
de un instante otoñal a la deriva.
No hay comentarios:
Publicar un comentario